Quinta de la Fuente del Berro (Madrid)
Madrid cuenta con distintas zonas ajardinadas y ahora toca hablar de la Quinta de la Fuente del Berro. Hacía años que no pasaba por allí pero el día que fuimos al Parque del Retiro para ver la exposición de Petrit Halilaj, nos dimos una vuelta por aquí. La verdad es que, este parque está cuidado y muy bonito. Es curioso cómo a pesar de estar al lado de la M-30 (circunvalación con bastante tráfico), el ruido es amortiguado por los árboles y los paneles que hacen de muro.
Tiene seis accesos y el recorrido que te voy a mostrar es desde la calle de Enrique D'Almonte, que se encuentra muy cerca de la calle Doctor Esquerdo y de la calle O 'Donnell. Nos encontramos con un gato justo en la entrada y paseaba tan tranquilo por la Fuente del Berro.
Nada más entrar vas a ver la Fuente de la Puerta, la Casa del Reloj a mano derecha y a la izquierda se encuentra el Centro Cultural Rafael Altamira.
El origen de la Fuente del Berro está ligado a una fuente de aguas de gran calidad que venía del arroyo Abroñigal, un afluente del río Manzanares. Desde los años 70 este arroyo se soterró.
Las primeras noticias de la Quinta de la Fuente del Berro datan del siglo XVII cuando D. Bernardino Fernández de Velasco adquiere diversas tierras para formar la Quinta de Miraflores o Huerta del Condestable.
La Quinta tal y como se conoce actualmente es un diseño del siglo XIX para convertirla en un espacio de entretenimiento. Posteriormente en el siglo XX también se realizó otra remodelación del espacio.
El Ayuntamiento de Madrid adquirió la Quinta de la Fuente del Berro en 1948 y se convirtió en un parque público. Tenía un tamaño de 10 hectáreas pero en 1970 le restaron 3.
Tiene una zona infantil, diversas fuentes y suficiente espacio verde como para disfrutar de las plantas, los árboles y diversos animales como los pavos reales.
Se supone que no se debe jugar a la pelota, ni ir en bicicleta y los perros deben ir atados, pero yo sí vi a gente montar en bici.
Las cotorras argentinas son fáciles de ver por esta zona, les encanta anidar en los cedros de este parque.
Los caminos son anchos y en general están bien adaptados para personas con movilidad reducida y para sillas y carros de bebés.
También se puede acceder a la Quinta de la Fuente del Berro desde el barrio de La Elipa por distintos puentes.
Es una zona un tanto complicada para aparcar, así que a priori aconsejo ir en transporte público. De todas formas, si quieres ir con tu vehículo, ten en cuenta que los alrededores de la calle Enrique D'Almonte son de pago, mientras que las calles de La Elipa, no lo son. Nosotros fuimos en coche y aparcamos en la calle San Emilio que está en La Elipa y al lado se encuentra uno de los puentes de acceso hacia la Quinta de la Fuente del Berro.
Está abierta desde las 6:00 a las 24:00 horas desde el 1 de abril al 30 de septiembre, y el resto del año desde las 6:00 a las 22:00 horas.
Tiene seis accesos y el recorrido que te voy a mostrar es desde la calle de Enrique D'Almonte, que se encuentra muy cerca de la calle Doctor Esquerdo y de la calle O 'Donnell. Nos encontramos con un gato justo en la entrada y paseaba tan tranquilo por la Fuente del Berro.
Nada más entrar vas a ver la Fuente de la Puerta, la Casa del Reloj a mano derecha y a la izquierda se encuentra el Centro Cultural Rafael Altamira.
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| Fuente de la Puerta |
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| Casa del Reloj |
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| Centro Cultural Rafael Altamira |
Las primeras noticias de la Quinta de la Fuente del Berro datan del siglo XVII cuando D. Bernardino Fernández de Velasco adquiere diversas tierras para formar la Quinta de Miraflores o Huerta del Condestable.
La Quinta tal y como se conoce actualmente es un diseño del siglo XIX para convertirla en un espacio de entretenimiento. Posteriormente en el siglo XX también se realizó otra remodelación del espacio.
El Ayuntamiento de Madrid adquirió la Quinta de la Fuente del Berro en 1948 y se convirtió en un parque público. Tenía un tamaño de 10 hectáreas pero en 1970 le restaron 3.
Tiene una zona infantil, diversas fuentes y suficiente espacio verde como para disfrutar de las plantas, los árboles y diversos animales como los pavos reales.
Se supone que no se debe jugar a la pelota, ni ir en bicicleta y los perros deben ir atados, pero yo sí vi a gente montar en bici.
Las cotorras argentinas son fáciles de ver por esta zona, les encanta anidar en los cedros de este parque.
Los caminos son anchos y en general están bien adaptados para personas con movilidad reducida y para sillas y carros de bebés.
También se puede acceder a la Quinta de la Fuente del Berro desde el barrio de La Elipa por distintos puentes.
Es una zona un tanto complicada para aparcar, así que a priori aconsejo ir en transporte público. De todas formas, si quieres ir con tu vehículo, ten en cuenta que los alrededores de la calle Enrique D'Almonte son de pago, mientras que las calles de La Elipa, no lo son. Nosotros fuimos en coche y aparcamos en la calle San Emilio que está en La Elipa y al lado se encuentra uno de los puentes de acceso hacia la Quinta de la Fuente del Berro.
Está abierta desde las 6:00 a las 24:00 horas desde el 1 de abril al 30 de septiembre, y el resto del año desde las 6:00 a las 22:00 horas.
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