Grutas de Bétharram
En las vacaciones del 2019 estuvimos en Francia, exactamente en la zona que se denomina Altos Pirineos y una de las actividades que a toda la familia nos apetecía hacer era ver las Grutas de Bétharram. A los niños les fascinó el poder hacer un viaje al "Centro de la Tierra", al menos eso pone en el folleto de las grutas. En el 2010 estuvimos pero eran tan pequeños que no se acordaban de nada, así que una de las paradas obligatorias de nuestro viaje fue visitar este lugar tan fantástico. Da igual cuantas cuevas vea de este estilo porque me maravilla lo que puede crear la naturaleza debajo de nuestros pies.
A quince kilómetros de Lourdes (Francia) se encuentran las Grutas de Bétharram, en francés Grottes de Bétaharram. Aunque se llega bien con GPS, hay carteles a lo largo de la carretera para que no te pierdas.
El parking es gratuito, está dividido para autobuses por un lado y coches, caravanas y autocarabanas por otro. Al lado del parking hay una caseta a la que hay que acceder para subir al autobús que te lleva a la entrada de las grutas.
Hasta que no se llega al edificio principal, no hay que pagar. En las oficinas de turismo y en algún establecimiento más, encontrarás tarjetas con descuentos. Aprovecha esa oportunidad para que te cueste un poquito menos.
La visita es de una hora y media aproximadamente y se pueden escuchar las explicaciones en ocho idiomas distintos: francés, inglés, italiano, alemán, español, portugués, holandés y polaco. Nuestro guía explicó en francés, luego en español y por último en inglés.
Se recorren tres de los diez kilómetros que se han descubierto, eso sí, siguen explorando por la cueva aunque debido a las visitas, ya lo hacen menos. Los meses de invierno son los únicos que no están abiertas.
Se pasa por los niveles 1, 4 y 5 de la cueva. La bajada que se hace es de ochenta metros. Cuando llueve mucho, se inunda el nivel 5 y entonces, ese nivel no se puede visitar.
El nivel 1 está adaptado a personas con discapacidad motora pero el resto de niveles no porque hay que bajar por unas escaleras. La temperatura de este nivel es de 14 grados, mientras que en el nivel 4 desciende a 13 grados y en el nivel 5 se está a 12 grados. Estas temperaturas se mantienen a lo largo del año independientemente de la temperatura del exterior. El agua que circula por allí no se puede beber porque es muy alcalina.
A lo largo del recorrido verás formas muy curiosas.
Los primeros descubridores escribieron sus nombres en la cueva con el humo de sus antorchas y se pueden ver a día de hoy. Exactamente el hallazgo ocurrió en 1845 y se abrió al público en 1903.
Se pasa por la mitad de una falla, se monta en una barca y el final se recorre en tren. A todo el mundo le encanta el último tramo.
Cada 100 años se consigue un centímetro de estalagmita, esto quiere decir que tienen que pasar miles de años para que una estalactita y una estalagmita se unan.
Consejos:
Las grutas están en la localidad de Saint-Pé-de-Bigorre y si quieres ver su web pincha en Grottes de Bétharram.
¿Merece la pena visitarlas? Desde mi punto de vista sí, es una de las paradas obligatorias si vas a los Altos Pirineos y más con niños/as.
Antes de acabar y como recordatorio ¿qué es una estalactita y una estalagmita? No sé tú pero yo muchas veces las confundo, qué le voy a hacer, se me olvida la definición. Así que me viene estupendamente recordar que la formación calcárea que cuelga del techo es la estalactita y la del suelo es la estalagmita.
A quince kilómetros de Lourdes (Francia) se encuentran las Grutas de Bétharram, en francés Grottes de Bétaharram. Aunque se llega bien con GPS, hay carteles a lo largo de la carretera para que no te pierdas.
El parking es gratuito, está dividido para autobuses por un lado y coches, caravanas y autocarabanas por otro. Al lado del parking hay una caseta a la que hay que acceder para subir al autobús que te lleva a la entrada de las grutas.
Hasta que no se llega al edificio principal, no hay que pagar. En las oficinas de turismo y en algún establecimiento más, encontrarás tarjetas con descuentos. Aprovecha esa oportunidad para que te cueste un poquito menos.
La visita es de una hora y media aproximadamente y se pueden escuchar las explicaciones en ocho idiomas distintos: francés, inglés, italiano, alemán, español, portugués, holandés y polaco. Nuestro guía explicó en francés, luego en español y por último en inglés.
Se recorren tres de los diez kilómetros que se han descubierto, eso sí, siguen explorando por la cueva aunque debido a las visitas, ya lo hacen menos. Los meses de invierno son los únicos que no están abiertas.
Se pasa por los niveles 1, 4 y 5 de la cueva. La bajada que se hace es de ochenta metros. Cuando llueve mucho, se inunda el nivel 5 y entonces, ese nivel no se puede visitar.
El nivel 1 está adaptado a personas con discapacidad motora pero el resto de niveles no porque hay que bajar por unas escaleras. La temperatura de este nivel es de 14 grados, mientras que en el nivel 4 desciende a 13 grados y en el nivel 5 se está a 12 grados. Estas temperaturas se mantienen a lo largo del año independientemente de la temperatura del exterior. El agua que circula por allí no se puede beber porque es muy alcalina.
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| Bajada al nivel 4. |
A lo largo del recorrido verás formas muy curiosas.
Los primeros descubridores escribieron sus nombres en la cueva con el humo de sus antorchas y se pueden ver a día de hoy. Exactamente el hallazgo ocurrió en 1845 y se abrió al público en 1903.
Se pasa por la mitad de una falla, se monta en una barca y el final se recorre en tren. A todo el mundo le encanta el último tramo.
Cada 100 años se consigue un centímetro de estalagmita, esto quiere decir que tienen que pasar miles de años para que una estalactita y una estalagmita se unan.
Consejos:
- Hay que ir abrigado, con un forro polar o similar.
- Aunque el suelo está muy bien, aconsejo ir con calzado cerrado tipo bota de montaña o zapatilla de deporte.
- Se pueden hacer fotos pero sin flash para no dañar las rocas.
- No se deben tocar las estalactitas ni las estalagmitas, tenemos grasa en las manos y podemos dañarlas. Hay un techo en concreto que es relativamente bajo y te dejarán tocarlo, hasta las personas que vayan en silla de ruedas llegarán a tocarlo.
- Una vez que se sale del recinto, si tomas la carretera de la derecha, aproximadamente a un kilómetro y medio, encontrarás una zona con mesas para hacer un picnic y disfrutar de las vistas del río.
- Puedes entrar con niños y bebés pero ten en cuenta que no podrás llevar el carro de bebé más que en el primer nivel. Yo aconsejo que ni para ese nivel lleves el carro.
- Cuentan con baños en el edificio por el que se entra a las grutas y son bastante antiguos. Para hombres está el urinario masculino y en vez de váter hay taza turca.
- Al final del recorrido se sale por otro edificio en el que hay cafetería, tienda de regalos, baños y está al lado del parking.
Las grutas están en la localidad de Saint-Pé-de-Bigorre y si quieres ver su web pincha en Grottes de Bétharram.
¿Merece la pena visitarlas? Desde mi punto de vista sí, es una de las paradas obligatorias si vas a los Altos Pirineos y más con niños/as.
Antes de acabar y como recordatorio ¿qué es una estalactita y una estalagmita? No sé tú pero yo muchas veces las confundo, qué le voy a hacer, se me olvida la definición. Así que me viene estupendamente recordar que la formación calcárea que cuelga del techo es la estalactita y la del suelo es la estalagmita.
¿Conocías las Grutas de Bétharram?
¿Cuál es tu cueva favorita?
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