Día Internacional de la Mujer 2022

   El Día Internacional de la Mujer seguirá teniendo sentido mientras siga habiendo desigualdades entre hombres y mujeres, solo por el hecho de nuestro género. Debemos apoyarlo y participar, aunque nuestra situación sea la mejor del mundo. Tenemos que ser conscientes de que sigue habiendo mujeres que tienen situaciones discriminatorias. Esa es la realidad, nos guste o no.

Símbolo de la Mujer (Coslada, Madrid)

   Hay tantas historias como personas en el mundo. Llevamos una mochila cargada de recuerdos de todo tipo, tenemos cicatrices que demuestran que hemos vivido, unas han sanado, otras están en ello y las hay abiertas, quién sabe si llegarán a curarse.

   Este año el lema que ha elegido la ONU Mujeres es "Igualdad de género hoy para un mañana sostenible".

   Puede parecer que meten con calzador la parte climática; sin embargo, las mujeres tienen menos acceso a los recursos naturales, y a menudo, asumen una responsabilidad desproporcionada como encargadas de asegurar el suministro de comida, agua y combustible. 

   Llevo siete años escribiendo y reflexionando sobre nuestro papel en este mundo a través de este blog. Al principio, de una manera más genérica, y poco a poco, voy afinando este piano con temáticas que me parecen interesantes y que hay que mostrar.

   Siempre digo que nadie sale de su país deprisa y jugándose la vida si tiene raíces sólidas. Nadie viene a delinquir, ni a quitarnos nada, vienen a tener una vida sin sobresaltos, en la que puedan ser felices y aportar al nuevo país. España es mestiza de siempre y eso nos enriquece. 

   Preparando este post me he dado cuenta que mi círculo es bastante cerrado en cuanto a personas de otras nacionalidades, no me voy a fustigar por eso, pero sinceramente, conocer a personas de otros países nos enriquece y nosotras a ellas.

   Para este post cuento con mujeres que me han sorprendido. He conectado con sus historias, sus inquietudes y me han hecho ver que tengo razón en mi pensamiento. Siento admiración por ellas, por su valentía, por sus inquietudes y por el valor que le dan a la vida, a nuestro país y todo lo que aportan a esta sociedad. Son mujeres de carne y hueso, con luz propia, decididas, con una mente abierta y a las cuales les agradezco enormemente que sin conocerme de nada, hayan accedido a hablar conmigo y a mostrarse a través de la fotografía.

   Te propongo un viaje alrededor del mundo. Sube al avión de Fotografía y Lugares para conocer a mujeres de China, Rumanía, Ecuador, Venezuela y Afganistán. Te aseguro que este viaje va a ser especial, emotivo y muy enriquecedor. Abróchate el cinturón que despegamos.

 Un mundo por descubrir

   Nuestro viaje comienza en China y en él descubrimos a Rosa (su nombre español, aunque se llama Wang Zhuo). Una mujer alegre, dinámica, creativa y con las ideas muy claras. Es una persona que se supera cada día, se pone retos que parecen difíciles pero a ella no se le resiste ni la letra R al hablar.

Rosa es dueña de la tienda Tocado & Pamela Tu Orquídea.

   Su historia comienza cuando decide que quiere conocer mundo con 19 años. Había terminado sus estudios y quería descubrir qué le podía ofrecer el mundo. Sus inicios en España pasan por un pueblo de Murcia del que guarda unos recuerdos entrañables. Practicó español con niños de tres años y según lo que dice, tuvo suerte al encontrar la gente que la arropó en ese periodo, aunque se sintiera sola por tener a la familia a miles de kilómetros.

   Aunque reconoce que alguna vez ha notado algún detalle xenófobo, dice que no ha sido algo descarado hacia ella o su entorno. Tiene claro que el idioma es un gran problema para la comunidad china, ya que, no todas las personas saben manejarse en español, y hay veces que tienen dificultades con los trámites administrativos y bancarios. Es necesario un servicio de apoyo para que no se sientan excluidas.

   Dice que no es mejor una u otra cultura. Todo tiene su parte buena y mejorable. Ella escoge lo que le aporta, lo que puede ayudar a su familia y a su hija. Cuando su pequeña cumplió once años decidió compaginar la labor de madre y realizarse profesionalmente como ella quería. Para Rosa fue importante contar con el apoyo de su hija para tomar esa decisión.

   Es dueña de un negocio en el que cuida cada detalle, ve a sus clientas y ya está pensando qué les va a favorecer más, hace diseños propios y está en constante evolución. Le gusta que la gente brille. Ha estudiado desde nutrición, psicología, estética... Es una artista con mucha luz como se puede ver a través de este dibujo que ha hecho. Una flor de loto que simboliza a la mujer, la elegancia y lo limpio.

   Rosa representa la ambición y la superación para avanzar, mejorar y aprender cada día algo nuevo. Comenta que podría ser feliz en cualquier parte del mundo con lo que tuviera. Lo importante es tener un buen equilibrio en todos los aspectos de la vida.

¿Qué hay más allá de lo conocido?

   En España hay más de 650.000 rumanos y he tenido la suerte de contar para esta entrada con Carolina. Ella llegó aquí porque necesitaba un cambio de rumbo tras divorciarse. Allí no podía cicatrizar sus heridas emocionales.

    Le encanta España y como ella dice, el sol le da la vida. De los españoles le chocó que fuéramos tan relajados y poco puntuales, además, le pareció curioso que dobláramos las películas, especialmente, notar la misma voz para varios actores o actrices. Considera que somos dulces, en comparación con ellos.

   Aunque era ortodoxa, en España se ha convertido a la religión musulmana. Ahora mismo le llena más y como dice, da igual la religión, lo que cuenta es la persona.

   Considera que las mujeres españolas tenemos más libertad. Aclara que hay diferencias educacionales y sociales. Una de las cosas que tenía claro es que además de estudiar, casarse y tener hijos, necesitaba sentirse realizada de múltiples maneras.

   Cree que las mujeres rumanas tienen menos confianza en sí mismas y ella anima a cualquier mujer a que tome las riendas de su vida, que apueste por lo que realmente quiere y le gusta, que todo es posible si se es constante, que se liberen de sus ataduras y aunque el camino puede tener obstáculos, hay que seguir caminando. Si hace falta, tómate tu tiempo, llora, patalea, desahógate para levantarte y coger la fuerza suficiente para seguir. 

   Agradece la oportunidad que le brindaron al llegar a Madrid para trabajar. Quiere seguir avanzando en su trabajo y conseguir ascender. Sabe cinco idiomas (rumano, español, inglés, francés e italiano). El español lo aprendió viendo películas y series con subtítulos. Es licenciada en francés e italiano pero aún no ha convalidado su título. Reconoce que el trámite cuesta mucho dinero y hay muchas trabas.

   Por desgracia ella sí ha sentido discriminación por ser rumana y no saber el idioma. Se queja de que los medios de comunicación solo señalan noticias malas de los rumanos, lo que provoca rechazo.

   Carolina desprende dulzura, tiene un gran poder de adaptación y ha conseguido creer en ella y sus posibilidades.

Cambio de rumbo

   Amarilis tiene nombre de flor, es ecuatoriana y lleva en España 30 años. Este país no era su primera opción, simplemente era un lugar de paso, su objetivo siempre fue Italia, pero los acontecimientos de sus primeros días en Madrid, hicieron que se quedara y amara este lugar.

   Comenta que el trámite para conseguir la residencia en España antiguamente era mucho más fácil que en la actualidad. Habla con cariño de su país, pero reconoce que la situación es peligrosa y especialmente para las mujeres.

   Cuando llegó, le llamó la atención que las mujeres pudiéramos pasear solas y fumásemos. La libertad que hay en España le encanta y la tranquiliza. No hay nada peor que vivir con miedo. 

   También dice que la gente le pareció brusca y que hablaba muy alto. De hecho, dice que las mujeres en su país deben hablar más bajo, de manera dulce y florida.

   En nuestra charla para esta entrada, hablamos de términos tan despectivos como "sudaca" y "panchita". De cómo Carmen Posadas utilizó de manera positiva el término "sudaca", para cambiar la connotación negativa. Formó una asociación llamada "Sudacas Unidas", y por lo que he podido leer, invitaron a Francisco Umbral a una de sus celebraciones pero no les hizo caso, o eso pareció, porque a partir de ese momento, él, ese hombre rudo y con don de palabra, comenzó a utilizar el término de manera positiva.

   Amarilis dice que siempre la han tratado con respeto en España, aunque sí ha visto como otras personas sufrían malas contestaciones. No se queja, es de las que dice que ha tenido suerte. Se siente integrada y se ha hecho un hueco en este país para ser parte de él. Un dicho que emplea es "donde fueres, haz lo que vieres".

   En Ecuador era profesora de inglés. Estaba fija en un colegio público cuando decidió venir a Europa, como ella dice, tenía trabajo para toda la vida, pero tuvo claro que debía cambiar de rumbo.

   Es de las personas que tuvo que dejar a sus hijas mientras encontraba su lugar en otro país. Comenta que fue difícil la decisión y los tres años que pasó lejos de ellas. Lloró y sintió que las había abandonado aunque fuera por buscar una mejor vida para las tres. Aconseja a otras personas ecuatorianas que salgan del país, que se forjen un buen futuro y si tienen hijos, que salgan con ellos y si no pueden llevárselos, entonces, que se queden. 

   Amarilis es una persona generosa, dulce, alegre y que ha conseguido la vida que se ha forjado paso a paso.  

En busca de seguridad para seguir viviendo

   En este viaje tan particular seguimos en Sudamérica para hablar de Wendy, una venezolana que llegó a España hace cuatro años con residencia humanitaria.

     Hace unos años fue concejala y por manifestarse, la detuvieron en el 2004 en su país. Aunque antes de venir ya no estaba metida en temas políticos, ella sí sintió que en cierta manera estaba amenazada y comenzaba a afectar a su familia más cercana. Por este motivo, decidió venir a España e instalarse en Madrid. Una ciudad que había conocido en un viaje y en la que tenía como referente a una de sus hijas. Nunca pensó que saldría de Venezuela, pero las circunstancias la sacaron de allí.

   Para seguir trabajando en Venezuela tuvo que ser "políticamente correcta". Es profesora de arte, coach y se dedica al desarrollo personal. En España tuvo que buscar otra salida, así que se convirtió en esteticista. Estudió para ello y se labró un camino profesional mientras estudiaba y obtenía titulaciones en España, para poder dedicarse a la parte de habilidades personales e interpersonales. Dice que convalidar el título universitario le costaría mucho y que aquí el máster no vale nada, eso sí, recomienda que todo el mundo venga con su título de bachiller, ya que, le abrirá puertas. Está arreglando los papeles necesarios para tenerlo aquí.

   No ha notado discriminación como tal, pero sí cree que a nivel profesional y en el mundo de la formación y los recursos humanos, ha tenido más dificultad para poder trabajar. La pandemia le ayudó a poder trabajar online con empresas y personas.

   Es una mujer versátil que le gusta viajar y el arte. Se ha adaptado a España y a Madrid. Dice que la mochila la trajo vacía para llenarla de nuevas experiencias. El viaje de Venezuela a España le sirvió para dejar su pasado allí, no quería quedarse en un limbo en el que no disfrutara de todo lo nuevo que iba a vivir.

   Para ella es importante adaptarse al lugar donde vive y trabaja. No reniega de sus raíces pero cree que hay que tener una mente abierta y empaparse de lo que te rodea. No se trata de recibir constantemente y de compadecerse, sino qué puedes ofrecer tú al nuevo país que te acoge. Aunque tenemos el mismo idioma, hablamos diferente y ella es camaleónica. Ha conseguido adaptarse porque así lo ha querido desde el primer minuto. 

   Según Wendy, todo es cuestión de actitud y empatía. Es disfrutona, feliz, amante de lo nuevo y ciudadana del mundo.

 Sobrevivir para alzar la voz

   Escuchamos y vemos historias que nos conmueven, nos indignan y nos hacen pensar en nuestra vida, en lo injusto de algunos actos y como hay mujeres que pierden su libertad e incluso la vida.

   Massouda Kohistani es una mujer afgana que ha tenido que huir de su país, así, sin paños calientes. Una mujer familiar que estudió inglés, licenciada en Administración de Empresas con más de 18 años de experiencia profesional en investigación, consultoría, liderazgo y promoción nacional e internacional. Activista de la defensa de la Red de Mujeres Afganas (AWN) y que se convirtió en miembro activo del comité de defensa de las mujeres que organizó la Fundación de Investigación Legal de Mujeres y Niños (WCLRF). Este comité comenzó a trabajar para que las mujeres tuvieran una mayor participación en el gobierno y en las organizaciones no gubernamentales.

Foto cedida por Massouda

   Hubo un tiempo mejor para ella y los suyos, así como para miles de afganos. Desgraciadamente los talibanes se hicieron con el país y comenzó un calvario para las mujeres a las que insultaban, acosaban, golpeaban y advertían. También entraron en las casas de líderes políticos y activistas sociales. El terror se apoderó de la población, esto no es un cuento, es la realidad. Por desgracia, esto lo ha vivido Massouda y otras muchas mujeres, hombres, niñas y niños. Es algo muy real. 

   Tuvo que quemar los documentos y los libros por miedo a las represalias de los talibanes. Su vida corría peligro, así como la de otra tanta gente que había luchado porque su país se desarrollara y contara con unos derechos humanos decentes. 

   La eligieron para dar voz a todo lo que ocurría en su país y concedió varias entrevistas a periodistas españoles, gracias a esa conexión, a la ayuda de esa periodista que se preocupó por ella, consiguió llegar al aeropuerto de la mano de otros periodistas, a pesar de los golpes recibidos por los talibanes y salió del país rumbo a España.

   Siente un especial agradecimiento por esa ayuda que se la brindó pero siente incertidumbre por la situación de asilo político, por el idioma y por cómo se va a poder ganar la vida.

   Tenía su plan de futuro para ella y su familia en Afganistán pero todo se fue al traste. Su familia se enfrenta a la escasez de alimentos, de trabajo y se ven obligados a vender cosas de su casa para seguir sobreviviendo.

   Sigue pensando en su país, aunque es consciente de que la falta de seguridad, la guerra, los ataques suicidas y otras actividades terroristas talibanes no ayudan al país. Cada vez es peor la situación, antes las mujeres tenían una vida normal y todo el mundo tenía sus negocios.

   Massouda pide para el Día Internacional de la Mujer que la gente se solidarice con las mujeres de Afganistán.

   Siento una gran admiración y respeto por ella, así como por todas las mujeres que luchan por derechos que deberían tener, pero por desgracia, se los niegan. Me entristece que haya lugares del mundo así, y tenemos que alzar la voz por ellas. Yo tengo suerte por vivir en España, al menos hasta el momento.

   Massouda me parece que es una mujer valiente, con ideas firmes y que quiere un mundo más justo e igualitario para su generación, para las anteriores y las venideras.

Reflexiones del Día Internacional de la Mujer

• Cualquiera de las mujeres que leamos esta entrada, nos podemos sentir identificadas con las cinco protagonistas.
• Me he encontrado con cinco mujeres fuertes, decididas, con ideas claras que aportan un gran valor a la sociedad.
• La multiculturalidad enriquece a un país.
• Debemos confiar más en nosotras mismas y decidir el camino que nos va a hacer felices.
• Querer crecer como persona y profesional no se debería penalizar.
• La adaptación y la curiosidad son dos virtudes que tienen estas mujeres.
• Aprendamos a querernos, respetarnos y disfrutar de la vida como nos dé la real gana.

   Mil gracias a Rosa, Carol, Amarilis, Wendy y Massouda por vuestra predisposición, por contarme una parte de vuestra vida, por ayudarme a escribir esta entrada y por existir. El mundo es mejor gracias a vosotras, estoy segura.

   No me puedo olvidar de dar las gracias a Pilar, Alicia y Flo por mover los hilos para hacer posible los encuentros y entrevistas. También a ASEME porque gracias a esta asociación he conocido a Wendy.

   Si has llegado hasta aquí, espero que te hayan gustado las historias de estas cinco mujeres, que te hagan pensar y ayudes a que nuestro camino sea más llevadero hasta conseguir una igualdad real.

Mujer de Coslada

¿Qué te ha sorprendido más del post de este año?

Nota: pincha en Día Internacional de la Mujer y verás los posts de otros años. También te invito a que veas también el post de Lideresas Inspiradoras por el Día Internacional de la Mujer en el blog de Formagesting.